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Bewertung
★
Me sorprende que tenga buena calificaciones. Está claro que nosotros pillamos un mal día. Fuimos a cenar y al entrar y pedir mesa, tanto el camarero como la camarera, fueron tercos y muy antipáticos, casi nos perdonan la vida con la mirada, después de deducir, por su cara y gesto, que sí podíamos sentarnos, nos quedamos allí, sentados, sin ser atendidos. El camarero limpiaba otras mesas sin venir a pedirnos que queríamos y la camarera nos ignoraba por completo. Nosotros sólo queríamos cenar, por lo que no puedo opinar sobre la comida porque si nos atendieron. Entiendo que si tienes mucho trabajo lo correcto es no dar mesa y ya está, pero no ignorar al cliente. Al final nos largamos con lo incómodo que eso resulta. Nos fuimos a la pizzeria Mamma Mía que se come estupendamente y te atienden muy bien.