5 /5
Bewertung
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Mis 5 estrellas van para este bar tanto por el buen trato recibido como por lo buena que es su cocina. Y sobre todo porque en Punta lo tenemos todo ya muy visto y este me ha sorprendido. Fui un tanto reticente porque en ese local han pasado pizzería y diversos bares que no han llegado a cuajar. Está en un rinconcito escondido y en esta época con solito, en la terraza se está más que agradable. Cuando te vas, sientes que has comido una comida casera, muy bien hecha y aunque a priori se ve una carta similar a la d otros lugares le saben dar el punto a cada cosa para que sea diferente. De precio, más que bien. Muy buenas las carrilleras (con toque de canela) y las berenjenas de escandalo (la hacen rellenas de jamón y queso, pero queso curado en trozos, un acierto) y su salsa buenísima (de pimientos). Las croquetas de puchero también riquísimas. Muy bien hechas. Sabor intenso y un punto muy bueno. Ahora, aunque todo lo comido estaba bueno, la guinda del pastel creo que se la lleva el adobo de jurel. Vaya tela. No había comido un adobo así en mi vida. Para quien no le guste un pescado con espinitas, es un problemilla pero, os digo que merece muy mucho la pena. Un tipo de aliño espeso que no había probado antes nunca. Muy muy bueno. Y los postres también tremendos, tanto la crema de galletas como el flan de limón. Con ganas de volver.